La gaviotita

La gaviotita
dedicado al silencio
El mar
con su incansable temblor de cosa vieja
y su salubre olor de piedra y cielo
te vio partir con miedo en la mañana.
Cargada de rumor, de piedra y agua,
mojada con el aroma de las sangres
que con coraje tus patas derramaban,
erguida, tu cuello picoteando
cada pedazo de mi corazón abierto,
herido,que te di. Tu cuerpo marcó el vuelo
diste apenas un gemido, y sin mirarme
te lanzaste al vacío. Tu forma fue sombra
y apagó mi mirada: frente a mí, abierta toda
entera, quedaba la caldera de la mar infinita.
Me fui quedando ciega desde que te vi
serena. Silente ante tu ausencia
la mar te evoca : ella todo lo toca,
y en ti todo lo arrullo, voluble y sola...
Son sonidos de sirenas alemanas
que circunvalan al tiempo,
deshojan la esperanza,
y mensajera, te inclinas al abismo
y me abandonas
Estoy ciega
pero vuelas.
con su incansable temblor de cosa vieja
y su salubre olor de piedra y cielo
te vio partir con miedo en la mañana.
Cargada de rumor, de piedra y agua,
mojada con el aroma de las sangres
que con coraje tus patas derramaban,
erguida, tu cuello picoteando
cada pedazo de mi corazón abierto,
herido,que te di. Tu cuerpo marcó el vuelo
diste apenas un gemido, y sin mirarme
te lanzaste al vacío. Tu forma fue sombra
y apagó mi mirada: frente a mí, abierta toda
entera, quedaba la caldera de la mar infinita.
Me fui quedando ciega desde que te vi
serena. Silente ante tu ausencia
la mar te evoca : ella todo lo toca,
y en ti todo lo arrullo, voluble y sola...
Son sonidos de sirenas alemanas
que circunvalan al tiempo,
deshojan la esperanza,
y mensajera, te inclinas al abismo
y me abandonas
Estoy ciega
pero vuelas.
Voy a tu antojo.
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