CHILE : arquitecto reprimido enjuicia al estado
Un arquitecto herido en un ojo por la policía Carabineros en la marcha
del 11 de abril último anunció que interpondrá una querella contra el
Estado de Chile, también en nombre de otras víctimas de perdigones.
"Vamos a emprender acciones legales", aseguró Enrique Eichin Zambrano, de 58 años de edad, quien responsabilizó al Ministerio del Interior de las agresiones, aún cuando sean efectivos de la policía los autores directos de los ataques.
De acuerdo con Zambrano, citado hoy por Radio Universidad de Chile, es desde el Ministerio del Interior donde emanan las órdenes sobre cómo se actuará en las marchas.
El arquitecto, quien permanece internado en el Hospital del Salvador, donde será sometido a una segunda intervención ocular, precisó que las acciones legales se están evaluando con abogados de derechos humanos.
La idea es avanzar hacia una "forma mancomunada de emprender una querella contra el Estado" junto a las otras víctimas de heridas por balines, tanto en la región de Aysén como en los otros lugares del país, manifestó.
Zambrano criticó el argumento de las autoridades cuando alegan que este tipo de incidente le ocurre a las personas por asistir a las manifestaciones.
"Los chilenos tenemos derecho a manifestarnos. Tenemos que indicar, sobre todo en un periodo eleccionario, para dónde queremos que vaya la micro (autobús), y alejarnos de los ofertones que se están produciendo en este país", señaló.
El arquitecto participó en la marcha junto a su compañera Isabel Orellana, procedente de Montreal, y su hija, y fue impactado por un balín al término de la protesta, cuando se produjeron enfrentamientos entre adolescentes y Fuerzas Especiales de Carabineros, en las inmediaciones del lugar donde se realizaba un concierto al concluir la manifestación.
Aunque la marcha en todo momento se desarrolló de manera pacífica, fue al final que se registraron los incidentes, en que la policía se reprimió con carros lanza-agua y gases lacrimógenos a jóvenes participantes en la demostración, quienes repostaron a los uniformados con piedras, pedazos de hierro, palos y otros objetos.
Los balines, cargados de pintura y lanzados por las llamadas escopetas "paintball", son utilizados por la policía para identificar a determinados manifestantes, con el fin de poder proceder luego a su arresto.
En la marcha del 11 de abril último fueron detenidas más de un centenar de personas.
"Vamos a emprender acciones legales", aseguró Enrique Eichin Zambrano, de 58 años de edad, quien responsabilizó al Ministerio del Interior de las agresiones, aún cuando sean efectivos de la policía los autores directos de los ataques.
De acuerdo con Zambrano, citado hoy por Radio Universidad de Chile, es desde el Ministerio del Interior donde emanan las órdenes sobre cómo se actuará en las marchas.
El arquitecto, quien permanece internado en el Hospital del Salvador, donde será sometido a una segunda intervención ocular, precisó que las acciones legales se están evaluando con abogados de derechos humanos.
La idea es avanzar hacia una "forma mancomunada de emprender una querella contra el Estado" junto a las otras víctimas de heridas por balines, tanto en la región de Aysén como en los otros lugares del país, manifestó.
Zambrano criticó el argumento de las autoridades cuando alegan que este tipo de incidente le ocurre a las personas por asistir a las manifestaciones.
"Los chilenos tenemos derecho a manifestarnos. Tenemos que indicar, sobre todo en un periodo eleccionario, para dónde queremos que vaya la micro (autobús), y alejarnos de los ofertones que se están produciendo en este país", señaló.
El arquitecto participó en la marcha junto a su compañera Isabel Orellana, procedente de Montreal, y su hija, y fue impactado por un balín al término de la protesta, cuando se produjeron enfrentamientos entre adolescentes y Fuerzas Especiales de Carabineros, en las inmediaciones del lugar donde se realizaba un concierto al concluir la manifestación.
Aunque la marcha en todo momento se desarrolló de manera pacífica, fue al final que se registraron los incidentes, en que la policía se reprimió con carros lanza-agua y gases lacrimógenos a jóvenes participantes en la demostración, quienes repostaron a los uniformados con piedras, pedazos de hierro, palos y otros objetos.
Los balines, cargados de pintura y lanzados por las llamadas escopetas "paintball", son utilizados por la policía para identificar a determinados manifestantes, con el fin de poder proceder luego a su arresto.
En la marcha del 11 de abril último fueron detenidas más de un centenar de personas.
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