A las lágrimas de mi madre los Viernes Santos
Martita 8 meses, Bustinza, Pcia. de Santa Fe
Sonidos
El piar
de los pollitos
al nacer
el canto
de los búhos
en la noche
la lluvia
cuando caía
y mi madre me decía
recuerda, Martita,
a los chicos tan pobres
que no tienen techo
la bocina
del Ford
de mi padre
el rebuzno del burro
que me llevaba un día
en las sierras de Córdoba
y casi nos caímos juntos
del puente al río
el ruido
de la escopeta
de mi papá
cuando íbamos a cazar
los domingos, solos
las plumas que entonces caían
de cuarenta perdices
y de una liebre
su rabo caliente
el chirriar
de la grasa
sobre las brasas
del asado
cuando volvíamos
el silencio
cuando mi perra
secuestrada por el gavilán
cayó al fuego
el último
de los ladridos
de uno de mis perros
el Tupac, que mi padre...
y el sonido del revólver
el aletear
del arroyo
los días
de crecida
el pitear de la locomotora
al entrar en el puente ferroviario
y la huida de palomas
dos veces al día
el cascabel
de la serpiente
que casi pisé esa tarde
en el patio
el susto del teru teru
tomando agua
a la siesta
junto a mí y la iguana
bajo el sol dormidas
el coro de mi madre.
Marta Zabaleta©, Londres 12 de Abril de 2009
Sonidos
El piar
de los pollitos
al nacer
el canto
de los búhos
en la noche
la lluvia
cuando caía
y mi madre me decía
recuerda, Martita,
a los chicos tan pobres
que no tienen techo
la bocina
del Ford
de mi padre
el rebuzno del burro
que me llevaba un día
en las sierras de Córdoba
y casi nos caímos juntos
del puente al río
el ruido
de la escopeta
de mi papá
cuando íbamos a cazar
los domingos, solos
las plumas que entonces caían
de cuarenta perdices
y de una liebre
su rabo caliente
el chirriar
de la grasa
sobre las brasas
del asado
cuando volvíamos
el silencio
cuando mi perra
secuestrada por el gavilán
cayó al fuego
el último
de los ladridos
de uno de mis perros
el Tupac, que mi padre...
y el sonido del revólver
el aletear
del arroyo
los días
de crecida
el pitear de la locomotora
al entrar en el puente ferroviario
y la huida de palomas
dos veces al día
el cascabel
de la serpiente
que casi pisé esa tarde
en el patio
el susto del teru teru
tomando agua
a la siesta
junto a mí y la iguana
bajo el sol dormidas
el coro de mi madre.
Marta Zabaleta©, Londres 12 de Abril de 2009
Marta,
ResponderBorrarmuy grato ver la foto de esa beba
que fuiste y eres en los vericuetos
del tiempo y la memoria...y emocionante "escuchar" los versos
sobre tu madre. En la noche de Buenos Aires...
Abrazo grande
Ri
Agradezco a las mas de 46 comentarios positivos que he recibido hasta el dia de hoy, referidos a este spot.
ResponderBorrarMarta
17 de abril